Wednesday, March 01, 2006

Las relaciones con el gobierno


Las relaciones con el gobierno constituyen uno de los principales elementos de los asuntos públicos de las empresas. Muchas empresas disponen de departamentos independientes de relaciones con el gobierno. Las acciones de los organismos gubernamentales a nivel local, estatal y federal inciden de una manera decisiva en el modo en que operan estas organizaciones.

Funciones de los especialistas en relaciones con el gobierno:

Reúnen información.

Divulgan los puntos de vista de la dirección.

Cooperan con el gobierno en proyectos de beneficio mutuo.

Motivan a los empleados a participar en el proceso político.

El Lobbismo


El lobbismo esta relacionado con las relaciones con el gobierno no solo denota toda una serie de actividades correspondidas con la vigilancia y seguimiento de las acciones del gobierno y la divulgación de información a varios públicos, entre los que se incluyen los políticos elegidos por el pueblo.

El lobbista es la persona que representa a un grupo de interés y procura influir en las votaciones legislativas o en las decisiones de los administradores gubernamentales, en otras palabras, el lobbismo consiste en dirigir todas las energías de quien lo practica a obstaculizar, enmendar o aprobar las propuestas legislativas y las normas de las agencias reguladoras. Los lobbistas operan ante gobiernos locales, estatales y federales.

La naturaleza del Lobbismo

Aunque el público sólo percibe el lobbismo realizado por las grandes empresas, son muchos los intereses especiales que lo ponen en práctica. Las compañías de lobbismo que compiten entre si a menudo se contradicen mutuamente, lo que conduce a que los legisladores y funcionarios asuman la responsabilidad de sopesar los pros y los contras de un asunto antes de proceder a la votación. Un conflicto ya clásico es el debate entre la conveniencia de salvar empleos o de proteger el medio ambiente.

El problema del “trafico de influencias”

Existe una profunda desconfianza pública hacia los antiguos legisladores o funcionarios que sacan partido de sus contactos y cobran grandes sumas por realizar una actividad que comúnmente se denomina “tráfico de influencias”.